No Diario de Pontevedra podense ler as seguintes declaracións de Marcos Redondo onde aclara todo o que aconteceu estos días.
A la hora de explicar su forma de actuar, Redondo Vilavedra señala con nombre y apellidos a la responsable de su decisión, que no es otra que la líder socialista, Dulcinea Aguín. Sus desavenencias resultaron determinantes para dar este paso. No obstante, el integrante de la lista del PSOE es muy tajante a la hora de asegurar que en ningún momento se planteó la posibilidad de convertirse en un edil no adscrito. ''Es cierto que acudí al Concello para informarme, pero a eso tenemos todos derecho. A partir de ahí, se inventaron una serie de especulaciones y manipulaciones que parece que solo buscaban dañar mi imagen'', aseguró ayer.
Marcos Redondo tiene muy claro que convertirse en un tránsfuga no era una opción para él, ya que ''hubiese sido una falta de respeto muy grande para mis compañeros de partido y para las siglas. Esa nunca ha sido mi intención'', recalcó, a la vez que se mostró muy crítico con Dulcinea Aguín. ''Esta persona lleva 12 años dañando muchísimo a la agrupación. Lo único que hace es aferrarse a su puesto, a pesar de los resultados electorales (el PSOE volvió a ser superado por otros dos partidos, PP y SAL, en las últimas elecciones). Debería haber dimitido''.
El malestar de Marcos Redondo comenzó a gestarse poco después de haber aceptado la oferta para figurar en los puestos altos de la lista electoral socialista. Tanto es así, que las primeras desavenencias surgieron durante la precampaña, si bien no sería hasta el mes de mayo cuando las diferencias se hicieron más que patentes.
Según Redondo, compañeros como José Buezas (número dos) tenían constancia de esta situación. Sin embargo, lo mucho que se jugaba el PSOE en las urnas impidió que Redondo Vilavedra tomase una decisión drástica antes del 22 de mayo. ''En campaña aguantas lo que haga falta, pero, a partir de ahí, la situación ya era insostenible. Personalmente, considero que la que debería dimitir es la responsable del partido. Esa habría sido una decisión valiente, pero, ya que ella no lo hace, somos los que no estamos de acuerdo los que tenemos que dar ese paso'', recalca.
Así las cosas, el retorno en el futuro de Marcos Redondo a las filas del PSOE se antoja complicado. ''Mientras esté ella (en referencia a Aguín), será imposible. Su forma de hacer política es demasiado prepotente'', concluye.
NO HABLÓ CON EL PP
Como último apunte, el número tres de la lista del PSOE también zanjó cualquier tipo de polémica relacionada sobre un posible pacto con el PP. ''En ningún momento hablé con ellos'', enfatiza.
Esta aclaración coincide con la versión de Catalina González, que ayer también negó rotundamente haber mantenido negociación alguna con el hombre que hoy renunciará a su acta de concejal.