viernes, 18 de enero de 2008

Carta aberta a alcaldesa.

Hoxe vou por unha carta aberta que lle escribiu Alicia Cidranes e que sae nalgúns periódicos e que me parece moi interesante pois moitos do PP pensan o mesmo que ela pero non o din públicamente:

CARTA ABIERTA A LA ALCALDESA/ POR ALICIA CIDRANES

Estimada Catalina:



Permíteme unas líneas para decirte que no comparto ni por un momento tu forma de hacer política en mi Sanxenxo natal. Hace unos días estuve por allí, ya que resido habitualmente en Praga, donde me casé, pero no pierdo el contacto con Galicia. El Sanxenxo que tan bien vendía Martín ha pasado a ser un Sanxenxo "judicializado". Es inaudito, pero así es. Estuve hablando con un familiar que tiene un problema, y gordo, con el enlace de la Vía Rápida de O Salnés al polígono empresarial.

Lo que me contó no lo podía creer; un polígono al lado de un vial de alta capacidad y no se puede conectar porque entre la Consellería de Política Territorial y la alcaldesa no hay entendimiento. Luego me contó que se tomaron unas medidas judiciales que no hicieron otra cosa que enrocar más la situación. Mi pregunta fue: ¿Pero porqué la alcaldesa no llama a la Consellería y se pone a su disposición para arreglar esto? Y su respuesta fue: Porque le falta humildad y le sobra prepotencia.

Cuando una persona, de derechas, habla así de su alcaldesa, de derechas, hay algo que no funciona. Un regidor debe de estar por encima de cuestiones personales, y ser humilde para arreglar los problemas de TODOS los ciudadanos. No puede guiarse por los caprichos personales que ese día le invadan.

Estimada alcaldesa. Aznar, mientras fue consciente de la realidad, gobernó, y muy bien, en España. Cuando perdió la noción de la realidad y se volvió prepotente y nada humilde, llevó a España al caos, a una guerra que nadie quería y a un atentado en el que murieron 200 personas.

Estimada Catalina. Si nadie es capaz de decírtelo, permíteme que yo, aunque en la distancia, te pida humildad y sentido común para gobernar. Eres la representante de todos los que somos de Sanxenxo, no de tus caprichos o de los de los que te asesoran.

Estimada Catalina, aún estás a tiempo de cambiar. Lo contrario sería muy perjudicial para el pueblo. Recapacita y bájate de la moqueta del despacho a las aceras de la calle. Oye a tu alrededor, pero no sólo lo que te gustaría oir, sino todo lo que se dice. Yo, sólo escuché que estás judicializando la política municipal y eso, Catalina, creo que es lo peor que puedes hacer.

Desde la sensatez, un abrazo.